¡Y DALE CON LAS PAPELERAS Y BOTNIA!

Publicado en la edición ON LINE de LA VOZ DEL INTERIOR

¿Y EL RIACHUELO QUÉ...?

El río Uruguay estaba contaminado desde sus afluentes y mucho antes que Botnia entrase en producción. ¿A quién se le ocurrió cuestionar la situación preexistente? ¿Y por qué ahora y en base a qué pruebas? Cualquier tribunal internacional exigirá constancias muy rigurosas. Pero éstas eventualmente podrán ser esgrimidas como tales una vez que se inicie el proceso. Antes es prejuzgar.

¿Pueden ser tan tontos los uruguayos como para jugar a la ruleta rusa con sus propios compatriotas? ¿O la declamada contaminación de Botnia envenenará a la gente previa selección de nacionalidades?

Que Uruguay se manejó en este tema practicando la archiconocida política del hecho consumado es incontrovertible. Pero autorizar su entrada en funcionamiento durante una reunión diplomática de alto nivel, es una guarangada.

Poco podía hacer, por otra parte, la diplomacia argentina para impedir tal emprendimiento. De ahora en más, sólo resta acordar una comisión internacional que monitoree concienzuda y rigurosamente la producción. Constatado el hecho del envilecimiento del entorno como su consecuencia directa, recurrir a un tribunal internacional.

De paso, no nos olvidemos que Argentina salió perjudicada en casi todos los entuertos sometidos a jurisdicción o arbitraje internacional.

Enviado por Rubén Raúl Guillet el 11/9/2007 8:48:27 PM